13 de mayo de 2019

Déjà vécu

Todo un viaje soñando con que me dé un pie para gritar ¡cuando quieras!, y sin embargo su indiferencia termina por acercarme más.
Aún la rebelión debe esperar, nada ha costado en demasía. Las penas, lejos de fieros paisajes, aportan luz de patio a la curiosidad (¿adónde está el límite?)
Y aunque no pase, yo sé que no cambia.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

espiral

Varias propuestas para cruzar el río  cerca del mediodía se decide arriesgar el paso  El problema más agobiante  es voluntario, por supuesto...